Cine: Iron Man 3 (review).

Supongo que en Akihabara ya estábamos tardando; tras su estreno este pasado fin de semana, Iron Man 3 ha sido protagonista en docenas de webs repletas de reviews que ensalzan la nueva película de Marvel Studios como una de las mejores películas de superhéroes hasta la fecha. De hecho  las propias cifras cedidas por Disney tras su estreno hablan por si mismas del impactante éxito de la cinta, como pudimos ver en esta nuestra web ayer. Claro que esas cifras comparan su enorme éxito con Spider-man 3, y ya me diréis que mierda de referencia es esa.

Con esta tercera entrega, Marvel empieza lo que han llamado la Fase 2 de los Vengadores - es decir, la primera película que dará pie a la esperada The Avengers 2 (aka Los Vengadores 2) iniciando otra rehalia de films que continuarán con Thor 2, Captain America 2 y un largo etc.

Ahora que ya nos hemos puesto en materia vamos con el tema en cuestión; Iron Man 3 ha tenido una campaña harto agresiva durante todo este año (y parte del anterior) que nos ha bombardeado una y otra vez con contenidos de aperitivo que nos hacían la boca agua para el plato principal: Tráilers, imágenes, posters, clips, muñecos... Estábamos todos los fans de Iron Man que arañábamos las taquillas deseando ver la continuación de las aventuras de Tony Stark en la gran pantalla, y finalmente ese día ha llegado. Y aquí están mis impresiones.


La gente asegura que esta película a pesar del cambio de director de manos de Jon Favreau a Shane Black sigue sobradamente el estilo de las predecesoras, pero yo no opino lo mismo. De hecho, todo el mundo comenta que es la re-hostia, un películón del copón que ningún frikito debería perderse. La película me ha agradado, me ha entretenido y me ha divertido... pero al terminar la misma, me quedé con una especie de sensación de vacío... de decepción o algo similar. Como no me gusta ser críptico y esto no es un psicólogo (aunque claramente necesito uno), he decidido que ya que todo el mundo habla de lo maravillosa que es, yo voy a hablar de lo que no me ha gustado. Por que soy un tocahuevos, oye.
Por cierto, no me voy a andar con chiquitas con los SPOILERS. Avisados quedáis.

1) Poco Iron Man y Mucho Downey Jr.
Sé que a la gente le encanta este actor, y de hecho yo me declaro fan de su manera de ser y hacer... por que realmente no tengo muy claro si actúa o si simplemente Robert Downey Jr. se limita a ser él mismo y punto, por que francamente a mi Sherlock Holmes y Tony Stark me parecen el mismo tío pero ubicado en diferentes historias.

Hola niños, voy a mostraros como mola ser yo, jiji.

Sea como sea, la cuestión es que Downey Jr. ha dotado al Hombre de Hierro de una personalidad muy marcada que nos sedujo a todos los fans, pero por algún motivo esta película me parece una vuelta de rosca a la vuelta de rosca; me paso más tiempo viendo a Robert Downey Jr. satisfaciendo su ego que haciendo del vengador cuyo nombre titula el film. Y eso en muchas ocasiones, me agota.

"Sabe ese que dise..."

Montones de escenas de "este Tony Stark es de lo que no hay" y "oh Tony, pero que travieso eres (risas)" pero poco tema super-heróico he visto yo, llegando al punto en que parecía más una comedia de situación que un film de acción.

Por desgracia, el humor del film aunque me parece muy bueno, en ocasiones me parece sobrante y bastante estúpido, como si de fondo tuviesen que sonar risas enlatadas.

2) El trauma de Avengers.
Entre el toque desenfadado que le han dado a la película, han querido meter una serie de inacabables guiños a The Avengers cada diez minutos, remarcando que Tony salió con un trauma del final de la batalla. Ya sabéis, eso de meterse en un agujero negro y salir y tal como si se sacrificara por todos pero no.

Bueno el tema es que han querido reflejar esto poniendo al sr. Stark con unos problemas serios de ansiedad que le persiguen día y noche habiéndole hecho crear 42 armaduras. Bueno, o decirle a Jarvis que construya 42 armaduras, no me queda demasiado claro.

Soy Iron Man y ahora soy un profundo, oiga.

La cosa es que han decidido dotar a Tony Stark de miedos interiores y traumas psicológicos que lo perturban para darle una intensa profundidad que, por algún motivo, viendo la película me la sudaba. El Tony desenfadado y atrevido de las otras dos películas no necesita esta dosis de homosexualidad a mi parecer, y la historia de la película tampoco, por dos motivos.

El primero, por que me da la impresión de que me están obligando a ver The Avengers (cosa que encuentro sensata, yo también os obligaría a verla), y el segundo por que entre el toque de comedia de serie de media tarde y este rollo profundo, a veces me daba la impresión de estar viendo un crossover entre Austin Powers y Dark Knight Rises.

"Pepper, te voy a escribir una poesía. Hagamos el cepillo, yo pongo el palo y tú..."

3) Mucho ruido y poco Hierro.
Nos han bombardeado vilmente con tráilers e imágenes promocionales repletos de armaduras de todo tipo que nuestro amigo Stark ha creado... modelos acuáticos, espaciales, para salir de picnic...
Armaduras que combatían brutalmente sin parar en escenas de acción sin límite de explosiones que parecían ir a dejar a The Avengers en pañales.

Esta imagen es una falacia.

Y oye, así empieza... bombas, explosiones, flash, boom y... bueno, y un montón de escenas del bueno de Tony hasta que no llega el maldito final. Por que señores, durante el 80% de esta película, no sale ni una puta armadura hasta la batalla final. En vez de eso podemos ver a Tony Stark huyendo como puede y más tarde haciendo el James Bond. Y es que Marvel Studios ha hecho una de las cosas que más me enervan: basar su material promocional en escenas del final de una película. La madre que os pario... ¡La madre que os pario!

¡LA MADRE QUE OS PARIOOOOOO!

Gracias Tony.
Así que en vez de esto tenemos la película de Iron Man que más se parece a los cómics de Iron Man, la más fiel a la historia original. Por que los que se lean la serie regular de Iron Man, sabrán que todas sus sagas son como sigue:
1) Tony Stark es la hostia: un tío rico, inteligente y con éxito con las mujeres.
2) Tony Stark pierde toda su fortuna y bienes por algún motivo que puede variar.
3) Tony Stak los recupera mediante alguna maniobra aleatoria. Vuelta al punto uno.
Así que eso nos lleva hasta el film más fiel al cómic de Marvel, serie que por desgracia dejé de leer por que se me hacía un tostón. Por suerte en la película esto está mucho mejor llevado.

Me marginan por mi color de piel.

Y por cierto, volviendo al punto en que nos encontramos... Máquina de Guerra aka Iron Patriot bebe de la misma formula. Montones de posters promocionales e imágenes para que el bueno de Rhodes salga en la película para saludar, dar dos volteretas e irse volando mientras abraza al presidente.

En serio... ¿Esto es todo?
¿No saben cuantos fans hay de Warmachine en el mundo?
¿Cuantos frikis de las gatlings prefieren antes al amigo de Iron Man que al propio vengador?

Pues ya ves. Un poco más y el pobre ni sale.

4) Un Final Innecesario.
Ojo al spoiler. Después de una batalla que más parecen las tracas de valencia que un combate de Villano vs Superhéroe, nos meten un cierre a la película que a mi fue lo que me dejo más flácido.

Tony destruye los 42 trajes que hemos tenido el privilegio de ver una media de 0,3 segundos en pantalla por modelo, se quita el reactor arc y curan a Potts de sus poderes molones, todo esto aderezado con la voz en off de Downey que nos ha acompañado toda la película.

¿En serio Tony, para esto me sacas en tu peli?

En serio, innecesario. Todos sabemos que vas a empezar otra vez con los trajes etc pero... ¿A que viene ese rollo de lo solucionamos todo y comimos perdices? Todos curados, arcoiris en el horizonte, y Mufasa te guiña un ojo. Pues muy bien.

Y a continuación, unos créditos ochenteros a lo Equipo A que pintan menos que Harry Potter en el día del padre.

Ah, y no olvidemos esa escena post créditos con Banner, que me dejo así como frío. Más risas enlatadas de fondo. Gracias.

Devolvedme mi Thunderstruk, cabrones.

4) La música.
Yo lo siento mucho, pero a mi Marvel Studios, Shane Black o quien sea que lo haya decidido me ha decepcionado sobremanera con la elección de la banda sonora. Es decir, hay unos temas de la BSO que son en la linea de siempre, pero los temas que adornan la película, son flojisimos.
¿Dónde esta ese poderío protagonizado por AC DC de las dos cintas anteriores y de los Vengadores? Esa marca de Iron Man que hacía que asintieramos diciendo "sí nene, ese es el ritmo".
Pues en ningún lado.
Ahora Tony es un popero. Toma ya.

5) El puto niño.
He aquí minutos, minutos y minutos de metraje que me han sobrado. En serio, coged la película, quitad todas las escenas del niño de los huevos, y veréis que daba igual su existencia para el desarrollo de la historia.
En vez de eso, el crío le quita peso y emoción a todo el tema del Mandarín y AIM, haciendo que nuestra atención de disperse por otros lados y le quite ritmo a la película.

Chaval, al patíbulo.

6) Y para finalizar...
Con todo esto, no digo que la película sea mala. Me gustaron más las anteriores a modo personal, pero Iron Man 3 es entretenida, divertida y no aburre.
No solo eso, el villano y sus masillas me encantan, los efectos especiales son más espectaculares que nunca y todos los guiños hacen que se me escape una sonrisa.
Hay pelis de superhéroes que hacen que llores cerebro, como el Motorista Fantasma, Wolverine: Origins o Spider-man 3 y esta no se encuentra ni de lejos en ese lote.
Pero pienso que ha tenido demasiado bombo y platillo para el resultado final, que con todo lo prometido en la agresiva campaña previa, me ha resultado decepcionante.

Y con eso, os dejo rebatirme, que se que os encanta cuando me pongo así de troll.
¡AVENGERS ASSEMBLE!