A lo largo del pasado diciembre de 2015, ECC Ediciones lanzó al mercado en una estupenda y preciosa reedición en cartoné una novela gráfica que en la segunda mitad del ahora lejano 2004 sacudió por completo los cimientos del viejo Universo DC.
Crisis de Identidad fue mucho más que un simple evento multitudinario, una saga o un cómic como tal. Lo que con esta obra aportó la historia de Brad Meltzer solo puede calificarse como un gigantesco efecto dominó, una piedra en el estanque cuyas hondas continuaron vibrando por años en todas las tramas que siguieron, afectando a toda la comunidad superheroica y a la mitología del universo DC.
Ahora, este mito ha sido recopilado por completo - la miniserie original de siete números regulares y el Identity Crisis 10th anniversary edition - en un único volumen cartoné que en sus 288 páginas a todo color nos brinda además una fantástica introducción de la mano de Joss Whedon, los comentarios del equipo creativo, una galería de bocetos y el guion completo del primer episodio, todo bajo una encuadernación blanca que se contrapone con la oscuridad que uno puede encontrar en sus páginas interiores.
Nadie escapa a la tragedia.
Es complicado hablar de una obra con tanta complejidad como posee Crisis de Identidad. Ningún lector fue capaz de escapar al influjo que la historia ejercía, provocando que todos nos replanteáramos muchas cosas sobre los héroes que siempre habíamos creído conocer tan bien.
Y es que Brad Meltzer conseguía con su trama mostrar a los héroes como los humanos que realmente vivían bajo la capa.
Lejos de sus músculos de acero, lejos de sus anillos de poder y más allá de su imperturbable quijada bajo su máscara se encontraban seres de carne y hueso cuyos sentimientos asentaban los pilares de sus personalidad. Seres que, fuera cual fuera su mundo de procedencia, poseían un lado frágil, un lado débil pero aun así inevitable que los convertía en auténticas personas más allá del icono e ideal de justicia que representaban.
Después de todo, toda esa gente que había jurado proteger a la humanidad - o la vida cósmica en general - eran seres sintientes con seres queridos. Más allá de su fachada imparable había una Lois Lane, o una Iris West, amigos, hijos y otros miembros cercanos de su intimidad que, tarde o temprano, quedaban expuestos al peligro en el que ellos vivían.
Brad Meltzer con maestría, nos sumerge bajo esta premisa en una historia a la que da inicio un superheroe al que jamás habríamos dado una importancia más allá de lo anecdótico, aun a pesar de haberse codeado en la Liga de la Justicia con Hal Jordan o Superman.
El Hombre Elástico es uno de esos héroes que habían permitido que su identidad fuera conocida. Un hombre sencillo, que incapaz de soportar las muertes a las que había tenido que hacer frente la Ligar de la Justicia hasta ahora, se había retirado a un plano mucho menos llamativo sin renunciar a sus mallas.
Un hombre noble, felizmente casado con el amor de su vida, Sue Dibny, una mujer normal sin ninguna habilidad especial más allá de los sentimientos mutuos profesados a su esposo que había logrado lo que pocos habían logrado, una membresía honorífica de la JLA, llegando a formar parte de esa gran familia.
Con esta feliz pareja bajo el foco da inicio nuestra historia, durante el cumpleaños de El Hombre Elástico, un día en el que nuestro héroe solo desea terminar su "patrulla" para regresar con los suyos y así poder celebrar las sorpresas que le aguardan.
No obstante, el que debería ser un día de absoluta felicidad se trunca, cuando sin ningún motivo aparente y en ausencia de su marido, Sue Dibny es asesinada en casa, dejando el perpetrador para su marido únicamente el cadáver calcinado de la mujer de su vida...
Con esta primera víctima, la habilidad narrativa de Brad Meltzer llega a una impactante sinergia con el arte de Rags Morales al trasladarnos a uno de los pocos funerales en viñetas capaces de derrumbar por completo al ávido lector de cómic. Y es que, aunque habitualmente prefiero como redactor situarme en un tercer plano relativamente imparcial - ya que la subjetividad como escritor es inevitable - he de confesar que el entierro de Sue Dibny me puso el corazón en un puño.
Esa sensación en la boca del estómago de vacío que pocas páginas pueden llegar a lograr.
Y sin embargo, desde un tercer plano narrativo al que da voz los pensamientos de Oliver Queen (aka Green Arrow) y torna en mudo un supuesto discurso emotivo de Wonder Woman, se nos traslada a un estado en el que la empatía por el destrozado marido es inevitable.
Esta antesala a Crisis de Identidad da pie al inicio real de esta historia, en la que a causa de la muerte de Sue a pesar de las extremas medidas de seguridad tomadas y la incapacidad por localizar al culpable, viejas culpas y oscuros secretos comienzan a ver la luz cuando la situación comienza a escapar del control de nuestros protagonistas.
Mentiras veladas y héroes que miraron hacia otro lado comienzan a descubrirse cuando a raíz de los sucesos acontecidos se descubre que, hace años y para proteger a los seres queridos de los miembros de la liga y sus identidades secretas, algunos de ellos cruzaron una linea de no retorno.
Con las mentiras emergiendo por doquier y la lista de víctimas engrosándose, la desconfianza y el miedo comenzarán a hacer añicos los pilares que tantos años habían sustentado una sociedad de héroes que había salvaguardado el mundo.
Unos pilares que quizá no eran tan firmes como se pensaba...
Crisis de identidad no es solo una historia de héroes y villanos.
Crisis de identidad habla de tragedia, de confianza y de moralidad.
Una obra maestra capaz de transformar toda una era de cómics y héroes en, únicamente, unos seres humanos que, al borde de la desesperación, buscan la esperanza.
Brad Meltzer (EE.UU., 1970) Autor de thrillers políticos instalados en las listas de best-sellers, cocreador de la serie televisiva Jack & Bobby, y presentador del programa de History Channel Brad Meltzer’s Decoded, este autor debutó en el mundo del cómic en 2002, sucediendo a Kevin Smith como guionista de Green Arrow. Posteriormente, escribió la serie limitada Crisis de Identidad, formando equipo creativo con Rags Morales, y participó en Superman/Batmannúm. 26. Ese mismo año, Meltzer se encargó de escribir el relanzamiento de Liga de la Justicia de América, dando forma a una etapa reeditada por ECC dentro de la línea Essentialscon la que ganó el Premio Eisner 2008 al Mejor Número Unitario.
Tras colaborar con Adam Kubert en el one-shot DC Universe: Last Will and Testament, en 2010 se encargó de escribir un arco argumental del cómic Buffy Cazavampiros 8ª Temporada. De forma previa a su participación en el especial 75 aniversario de Detective Comics, escribió junto a su hijo Theo una historia publicada en la cabecera infantil Aw Yeah Comics! (2013), dibujada por Franco Aureliani.
Rags Morales (Manhattan, Nueva York, EE.UU.; 1966) Formado en la Escuela de Joe Kubert, debutó conForgotten Realms, cómic ambientado en el universo de Dragones y Mazmorras. Tras cocrear una nueva encarnación de Black Condor, colaboró con Valiant Comics y asumió encargos de ilustración. A raíz del salto de calidad experimentado en Hawkman, comenzó a dibujar proyectos del calado de Crisis de Identidad, Nightwing, First Wave y Action Comics: asignación actual guionizada por Grant Morrison.
Crisis de Identidad fue mucho más que un simple evento multitudinario, una saga o un cómic como tal. Lo que con esta obra aportó la historia de Brad Meltzer solo puede calificarse como un gigantesco efecto dominó, una piedra en el estanque cuyas hondas continuaron vibrando por años en todas las tramas que siguieron, afectando a toda la comunidad superheroica y a la mitología del universo DC.
Ahora, este mito ha sido recopilado por completo - la miniserie original de siete números regulares y el Identity Crisis 10th anniversary edition - en un único volumen cartoné que en sus 288 páginas a todo color nos brinda además una fantástica introducción de la mano de Joss Whedon, los comentarios del equipo creativo, una galería de bocetos y el guion completo del primer episodio, todo bajo una encuadernación blanca que se contrapone con la oscuridad que uno puede encontrar en sus páginas interiores.
Nadie escapa a la tragedia.
Es complicado hablar de una obra con tanta complejidad como posee Crisis de Identidad. Ningún lector fue capaz de escapar al influjo que la historia ejercía, provocando que todos nos replanteáramos muchas cosas sobre los héroes que siempre habíamos creído conocer tan bien.
Y es que Brad Meltzer conseguía con su trama mostrar a los héroes como los humanos que realmente vivían bajo la capa.
Lejos de sus músculos de acero, lejos de sus anillos de poder y más allá de su imperturbable quijada bajo su máscara se encontraban seres de carne y hueso cuyos sentimientos asentaban los pilares de sus personalidad. Seres que, fuera cual fuera su mundo de procedencia, poseían un lado frágil, un lado débil pero aun así inevitable que los convertía en auténticas personas más allá del icono e ideal de justicia que representaban.
Después de todo, toda esa gente que había jurado proteger a la humanidad - o la vida cósmica en general - eran seres sintientes con seres queridos. Más allá de su fachada imparable había una Lois Lane, o una Iris West, amigos, hijos y otros miembros cercanos de su intimidad que, tarde o temprano, quedaban expuestos al peligro en el que ellos vivían.
Brad Meltzer con maestría, nos sumerge bajo esta premisa en una historia a la que da inicio un superheroe al que jamás habríamos dado una importancia más allá de lo anecdótico, aun a pesar de haberse codeado en la Liga de la Justicia con Hal Jordan o Superman.
El Hombre Elástico es uno de esos héroes que habían permitido que su identidad fuera conocida. Un hombre sencillo, que incapaz de soportar las muertes a las que había tenido que hacer frente la Ligar de la Justicia hasta ahora, se había retirado a un plano mucho menos llamativo sin renunciar a sus mallas.
Un hombre noble, felizmente casado con el amor de su vida, Sue Dibny, una mujer normal sin ninguna habilidad especial más allá de los sentimientos mutuos profesados a su esposo que había logrado lo que pocos habían logrado, una membresía honorífica de la JLA, llegando a formar parte de esa gran familia.
Con esta feliz pareja bajo el foco da inicio nuestra historia, durante el cumpleaños de El Hombre Elástico, un día en el que nuestro héroe solo desea terminar su "patrulla" para regresar con los suyos y así poder celebrar las sorpresas que le aguardan.
No obstante, el que debería ser un día de absoluta felicidad se trunca, cuando sin ningún motivo aparente y en ausencia de su marido, Sue Dibny es asesinada en casa, dejando el perpetrador para su marido únicamente el cadáver calcinado de la mujer de su vida...
Con esta primera víctima, la habilidad narrativa de Brad Meltzer llega a una impactante sinergia con el arte de Rags Morales al trasladarnos a uno de los pocos funerales en viñetas capaces de derrumbar por completo al ávido lector de cómic. Y es que, aunque habitualmente prefiero como redactor situarme en un tercer plano relativamente imparcial - ya que la subjetividad como escritor es inevitable - he de confesar que el entierro de Sue Dibny me puso el corazón en un puño.
Esa sensación en la boca del estómago de vacío que pocas páginas pueden llegar a lograr.
Y sin embargo, desde un tercer plano narrativo al que da voz los pensamientos de Oliver Queen (aka Green Arrow) y torna en mudo un supuesto discurso emotivo de Wonder Woman, se nos traslada a un estado en el que la empatía por el destrozado marido es inevitable.
Esta antesala a Crisis de Identidad da pie al inicio real de esta historia, en la que a causa de la muerte de Sue a pesar de las extremas medidas de seguridad tomadas y la incapacidad por localizar al culpable, viejas culpas y oscuros secretos comienzan a ver la luz cuando la situación comienza a escapar del control de nuestros protagonistas.
Mentiras veladas y héroes que miraron hacia otro lado comienzan a descubrirse cuando a raíz de los sucesos acontecidos se descubre que, hace años y para proteger a los seres queridos de los miembros de la liga y sus identidades secretas, algunos de ellos cruzaron una linea de no retorno.
Con las mentiras emergiendo por doquier y la lista de víctimas engrosándose, la desconfianza y el miedo comenzarán a hacer añicos los pilares que tantos años habían sustentado una sociedad de héroes que había salvaguardado el mundo.
Unos pilares que quizá no eran tan firmes como se pensaba...
Crisis de identidad no es solo una historia de héroes y villanos.
Crisis de identidad habla de tragedia, de confianza y de moralidad.
Una obra maestra capaz de transformar toda una era de cómics y héroes en, únicamente, unos seres humanos que, al borde de la desesperación, buscan la esperanza.
Brad Meltzer (EE.UU., 1970) Autor de thrillers políticos instalados en las listas de best-sellers, cocreador de la serie televisiva Jack & Bobby, y presentador del programa de History Channel Brad Meltzer’s Decoded, este autor debutó en el mundo del cómic en 2002, sucediendo a Kevin Smith como guionista de Green Arrow. Posteriormente, escribió la serie limitada Crisis de Identidad, formando equipo creativo con Rags Morales, y participó en Superman/Batmannúm. 26. Ese mismo año, Meltzer se encargó de escribir el relanzamiento de Liga de la Justicia de América, dando forma a una etapa reeditada por ECC dentro de la línea Essentialscon la que ganó el Premio Eisner 2008 al Mejor Número Unitario.
Tras colaborar con Adam Kubert en el one-shot DC Universe: Last Will and Testament, en 2010 se encargó de escribir un arco argumental del cómic Buffy Cazavampiros 8ª Temporada. De forma previa a su participación en el especial 75 aniversario de Detective Comics, escribió junto a su hijo Theo una historia publicada en la cabecera infantil Aw Yeah Comics! (2013), dibujada por Franco Aureliani.
Rags Morales (Manhattan, Nueva York, EE.UU.; 1966) Formado en la Escuela de Joe Kubert, debutó conForgotten Realms, cómic ambientado en el universo de Dragones y Mazmorras. Tras cocrear una nueva encarnación de Black Condor, colaboró con Valiant Comics y asumió encargos de ilustración. A raíz del salto de calidad experimentado en Hawkman, comenzó a dibujar proyectos del calado de Crisis de Identidad, Nightwing, First Wave y Action Comics: asignación actual guionizada por Grant Morrison.