Tras haber lanzado en 2014 una edición regular en formato tankoubon japonés de dos tomos, Norma Editorial lanzó a la venta el pasado mes de septiembre un volumen integral de la adaptación a manga de ALL YOU NEED IS KILL, orquestado por Ryõsuke Takeuchi (STandRS) y Takeshi Obata (Death Note, Bakuman), basado en la novela ligera ALL YOU NEED IS KILL, obra del guionista Hiroshi Sakurazaka (Yoko Wakaru Gendai Mahõ series).
Estamos hablando de un cartoné enorme de 28,5x19 cm, en cuyo interior encontramos la obra al completo a lo largo de 434 páginas en blanco y negro con 14 adicionales en color, repleta de extras´. Todo esto además, con una portada simplemente impresionante (que a muchos nos recordará a Starcraft) impresa en un papel que es una delicia al tacto. Un MUST HAVE en toda regla.
Nos encontramos ante una mezcla de alienígenas, exoesqueletos/mecha y el día de la marmota, algo que el autor original decide combinar con su imaginación para crear ALL
YOU NEED IS KILL.
En un futuro no demasiado lejano la humanidad combate contra una amenaza llamada los miméticos, unos monstruos esféricos que los están masacrando sin remedio.
La humanidad combate a bordo de los jacket, unas armaduras equipadas con la mejor tecnología disponible para hacer frente a la amenaza... sin demasiado éxito, ya que sus armas son bastante inútiles contra el caparazón de estos monstruos.
Entre todo este follón conocemos a nuestro protagonista Keiji Kiriya, un novato de la infantería jacket japonesa que se encuentra en la primera linea para defender la costa nipona.
Claro, que Keiji Kiriya se encuentra en una situación muy peculiar. Tras despertar en su cama con una extraña sensación de Deja Vu, Keiji deja que el día pase hasta que llega a la batalla, donde irremediablemente muere.... y vuelve a desperar en su cama.
Pero... ¿Qué esta pasando? Keiji Kiriya despierta dos días antes, realiza su día a día hasta la batalla donde muere como una perro, vuelve a despertar y la situación se repite una vez más, y otra, y otra...
Keiji no tarde en comprender que ha caído en una especie de bucle temporal que hace que esos dos días no dejen de repetirse, reiniciandole tras su muerte cada vez.
Keiji pronto empieza a superar el susto de la situación y, asimilando que no tiene escapatoria, decide aprovechar ese bucle para aprender tácticas de combate y depurar su técnica para poder sobrevivir al terrorífico día de la batalla.
Acompañando sus vivencias, se nos presentarán otros personajes entre los que destaca la adorable Rita Vritaski, apodada Perra de Combate.
Rita es una heroína estadounidense con un buen número de victorias a sus espaldas que a bordo de un jacket rojo chillón y empuñando un gigantesco hacha supone la mayor esperanza de la humanidad. Aunque este primer tomo a penas nos deja maravillarnos con su habilidad y adorabilidad, esperamos que en el siguiente Rita destaque un poco más... sobretodo a raiz del apoteósico final de este número.
Esta original historia repleta de violencia y la atemorizante carisma y cara de loco de Keiji es sin lugar a dudas el regreso de Obata a su salsa.
Podemos presenciar su espectacular habilidad para dibujar mecánicos, su trazo limpio y preciso y sus viñetas repletas de detalles que rozan la perfección.
Y por si eso fuera poco, el autor parece haber mejorado aun más, siendo ahora capaz de realizar las escenas de acción más dinámicas y sangrientas que recordamos haberle visto plasmar en papel... ¡Casi nada!
Altamente recomendable.
