Este mes de septiembre Ivréa lanzaba el segundo volumen de la nueva obra de Hiroya Oku, una nueva joya del creador de Gantz y Last Hero Inuyashiki que bajo el título de GIGANT es capaz de superar sus niveles de historias bizarras, mezclando ciencia ficción con fanservice hasta puntos insospechados.
La edición española llega en tomos formato B6 con sobrecubierta, en una copia exacta del tankoubon japonés. La obra se publica en la revista Big Comic Superior de Shogakukan desde el 8 de diciembre de 2017, y ya cuenta en su haber con tres tomos, por lo que la edición española probablemente no sea demasiado rápida... pero desde luego, estos dos tomos han demostrado que la espera merecerá la pena.
Hablar de este manga es complicado, así que intentemos ponernos al día rápidamente.
Rei Yokoyamada es un estudiante de preparatoria cuya meta en la vida es dedicarse al cine y que es seguidor de una actriz porno llamada Papico.
El destino propicia que Papico viva en su barrio, y una serie de coincidencias y situaciones les llevan a trabar amistad.
La cosa se complica cuando tras ayudar a un frikazo en gayumbos que se encuentra por la calle, este le pega un dispositivo en la muñeca que la permite volverse gigantesca.
Por si esto no fuera poco, al mismo tiempo hace aparición una página web llamada Enjoy the End (ETE) en la que se hace realidad la proposición más votada de sus usuarios... sin importar lo descabellada que sea.
Con todo esto en ciernes, llegamos a este segundo volumen en el cual, mientras ETE continúa revolucionando la ciudad con cada vez paranoias más gordas (incluyendo dragones voladores), Rei y Papico comienzan una relación sentimental.
De todo lo que ha pasado hasta ahora, probablemente un chico de secundario saliendo con una actriz porno buenorra es lo más cercano a la ciencia ficción que nos ha enseñado Oku, pero esto le sirve al autor como motivo para poner escenas de sexo hasta la saciedad.
Así es, tenemos por delante una buena ración de Papico follando con Rei sin parar, intercalándolo con otros aspectos de su relación, como la felicidad de ambos o como la familia del muchacho comienza a enterarse de que él tiene novia.
Pero todo este fanservice gratuito que tanto nos encanta, aparte de empujarnos a comprar toda la colección, tiene una finalidad, y es descubrir que de pequeña, Papico siempre quiso ser Ultraman.
Esto a priori puede parecer una parida aleatoria más, pero cuando en el centro de Tokyo aparece un monstruo de dimensiones titánicos que amenaza con exterminar a su población y Rei se encuentra en peligro, Papico vence sus miedos y termina saliendo al rescate...
Resultando en una chica pelirrosa de sesenta metros corriendo en pelotas a través de Tokyo, con sus tetas bamboleándose mientras aparece en todos los medios de comunicación posibles. Sí, ¡ya tenemos una heroína gigantesca combatiendo amenazas alienígenas!
Hiroya Oku está loco y nos encanta, plasmando sus diseños bizarros y todo el fanservice que le sale de los genitales para ofrecer una historia divertida a más no poder, y como siemrpe lo acompaña de su característico dibujo de trazo limpio repleto de chicas espectaculares y esa dosis de ciencia ficción pasada de vueltas que nos encanta.
Rei Yokoyamada es un estudiante de preparatoria cuya meta en la vida es dedicarse al cine y que es seguidor de una actriz porno llamada Papico.
El destino propicia que Papico viva en su barrio, y una serie de coincidencias y situaciones les llevan a trabar amistad.
La cosa se complica cuando tras ayudar a un frikazo en gayumbos que se encuentra por la calle, este le pega un dispositivo en la muñeca que la permite volverse gigantesca.
Por si esto no fuera poco, al mismo tiempo hace aparición una página web llamada Enjoy the End (ETE) en la que se hace realidad la proposición más votada de sus usuarios... sin importar lo descabellada que sea.
De todo lo que ha pasado hasta ahora, probablemente un chico de secundario saliendo con una actriz porno buenorra es lo más cercano a la ciencia ficción que nos ha enseñado Oku, pero esto le sirve al autor como motivo para poner escenas de sexo hasta la saciedad.
Así es, tenemos por delante una buena ración de Papico follando con Rei sin parar, intercalándolo con otros aspectos de su relación, como la felicidad de ambos o como la familia del muchacho comienza a enterarse de que él tiene novia.
Pero todo este fanservice gratuito que tanto nos encanta, aparte de empujarnos a comprar toda la colección, tiene una finalidad, y es descubrir que de pequeña, Papico siempre quiso ser Ultraman.
Resultando en una chica pelirrosa de sesenta metros corriendo en pelotas a través de Tokyo, con sus tetas bamboleándose mientras aparece en todos los medios de comunicación posibles. Sí, ¡ya tenemos una heroína gigantesca combatiendo amenazas alienígenas!
Hiroya Oku está loco y nos encanta, plasmando sus diseños bizarros y todo el fanservice que le sale de los genitales para ofrecer una historia divertida a más no poder, y como siemrpe lo acompaña de su característico dibujo de trazo limpio repleto de chicas espectaculares y esa dosis de ciencia ficción pasada de vueltas que nos encanta.